C.D. Independiente
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  • GANAR CON LA CABEZA

    “Ganar con la cabeza” la intención no es de enseñar a cabecear (aunque también contribuiremos a hacerlo). Ganar con la cabeza quiere decir aprovecharte de ella para llegar a ser mejor jugador y mejor equipo. Es lo que denominamos jugar inteligentemente. ¿Cuáles son los componentes mentales del juego? • Los pensamientos. • Las creencias y los sentimientos. • El estrés. • La concentración. • La autoconfianza. • El control emocional. • La planificación. • El análisis. • La motivación. • Y todo lo que ocurre en tu mente. Cada uno de estos componentes tiene su influencia en tu juego. Ser mentalmente fuerte quiere decir saber controlar tu mente y lo que sucede en ella, para así poder mejorar tu habilidad. Los signos más evidentes de fuerza mental son la consistencia y una habilidad estable No son mentalmente fuertes aquellos jugadores que tienen un “Día de suerte” sino aquellos que dan lo mejor de sí partido tras partido. Desde este punto de vista todo deportista tiene dos metas: 1. Hacer gala de sus habilidades de forma consistente. 2. Alcanzar el máximo nivel en el desarrollo de sus habilidades (o acercarse mucho al máximo). Alcanzar estos dos objetivos no es nada fácil, sin embargo es francamente posible. La fuerza mental puede aprenderse. Esta habilidad se puede entrenar y mejorar. Sólo unos pocos nacen mentalmente fuertes, sin embargo todos podemos llegar a ser mentalmente fuertes. La siguiente es una lista de otras cualidades típicas de un jugador mentalmente fuerte: – Tiene un alto grado de autoestima y no necesita que nadie le empuje, su motivación le viene de dentro y le empuja a superarse. – Siempre sale al campo a ganar y pondrá todo su empeño en conseguirlo. – Sabe distinguir entre el resultado de un partido (victoria o derrota) y su actuación personal. – Aprende de sus errores y acepta la crítica. – Es positivo, pero realista, y mantiene siempre una actitud positiva, tanto consigo mismo como con el partido. Nunca se rinde y nunca pierde la esperanza. – Mantiene los sentimientos bajo control. – Juega sólo con la mente y con los pies, no lo hace con las emociones: cólera, miedo, etc. Un jugador mentalmente fuerte nunca golpea el balón con ira, no responde al juego sucio con juego sucio, no se deja cegar por la gloria y nunca baja los brazos en medio de un partido. – Siempre conserva la calma y el equilibrio emocional, sobre todo en momentos de tensión. – La presión no le asusta. Es para él una buena ocasión de mostrar sus habilidades. La presión es para él un reto. – Mantiene la concentración en el partido. Nada le distrae. A lo largo del partido su atención no se desvía nunca de lo que ocurre en el terreno de juego. – Siempre se muestra activo e irradiando energía. – Tiene un alto grado de autoconfianza. – Cree ciegamente en su potencial. – Nunca busca excusas y siempre asume plena responsabilidad por su juego. – En todos los partidos explota al máximo de forma consistente sus habilidades. El jugador mentalmente fuerte también tiene las siguientes características: – Tiene su mente puesta en el partido, y “no la deja en casa” o en el vestuario. – Su trabajo mental es constante a lo largo del partido, hasta el pitazo final. – Sabe perfectamente que un partido de fútbol no empieza sólo cuando el árbitro hace sonar el silbato. – Es consciente de que el siguiente partido ya empieza inmediatamente después del pitado final del que está disputando. La preparación del siguiente partido empieza en cuanto se acaba el que se está jugando (en realidad empieza pasadas un par de horas). Ser mentalmente fuerte debería de ser adoptado por, futbolistas como entrenadores de cualquier nivel y edad, y a todo aquel que ame el fútbol o esté implicado de alguna manera en él: comentaristas, árbitros, periodistas, aficionados, padres etc., enfocados a mejorar el rendimiento y las habilidades en todas las facetas de la vida: trabajo, estudios, salud y deporte. Lo más seguro que sucederá es mejorar las habilidades en todos los campos.  CONTROL EMOCIONAL: juega al fútbol con las piernas y con la cabeza, no con las emociones. Si algunos de los mejores jugadores del mundo utilizan esas técnicas para prepararse mentalmente para un partido, ¡TÚ TAMBIÉN LAS PUEDES UTILIZAR!  

  • LOS SUEÑOS EXISTEN HAZLOS TUYOS

     Un joven futbolista colombiano que se constituye en ejemplo de crecimiento personal y profesional. Julián Fernández y el rol del arquero: “Desde los nueve años se propuso hacer una carrera y alcanzar los máximos niveles posibles” con trabajo y esfuerzo constante lo han llevado a dónde hoy se encuentra, Julián Fernández, de (Montería, Colombia , edad 14) es un futbolista colombiano juega como guardameta y actualmente se encuentra en BSPORT, Academia Portuguesa de fútbol, el mayo años r de dos hermanos, hincha del América de Cali. Julián lleva ya 5 años jugando fútbol, desde los nueve años practica fútbol. Ha pasado por diferentes escuelas buscando ser un gran futbolista. El primer reto que tuvo fue viajar a Europa a los 12 años de edad, en un programa de 15 días en una academia de Barcelona llamada Marcet lo que le sirvió para darse a conocer y poder ir el siguiente año por más tiempo. estuvo ahí dos meses y luego siguió buscando más oportunidades, ahí es conocido en bsport academia de Portugal e invitado a hacer parte de sus procesos , se encuentra allí desde febrero. En bsport ha recibido bastante apoyo que se ha ganado por sus cualidades y ganas de salir adelante en su carrera deportiva. le gusta el fútbol desde pequeño , pero lo practicaba por diversión, jugó en diferentes posiciones hasta que un día se metió bajo los tres palos y le gustó se sintió diferente, y ahí nació cómo portero y desde ese momento ha trabajado a conciencia pará surgir y ser diferente Admirador de David Ospina, por el amor y trabajo con conciencia que pone en cada partido y portero extranjero es Keylor Navas, por como surgió y llegó a ser un buen arquero. Julián vive el presente muy concentrado en mejorar cada día más, aprovecha al máximo el proceso, se enfoca mucho en lo que hace , disciplinado porque le gusta mucho ser portero. Extraña mucho a la familia, aún así lo motiva para trabajar duro seguir adelante y lograr su objetivo. El tema de los estudios no se han visto afectados, ni descuidados por Julián y que le han llevado a organizar su tiempo diario y tener tiempo para estudiar y académicamente ser profesional. Se ha adaptado a la cultura Portuguesa, el idioma, costumbres y comidas tampoco han Sido obstáculo para seguir el camino que se a trazado. Julián es ejemplo para todos esos muchachos colombianos que sueñan con ser futbolistas profesionales y estar en Europa, por lo que deben seguír como el , luchar , Trabajar, amar lo que se hace mucha dedicación y sacrificar muchas cosas que a veces cuesta soltar Julián feliz y exitoso regreso a Portugal y recuerda “ que sin motivación no hay sacrificio, sin sacrificio no hay disciplina y sin disciplina no hay éxito.  

  • EL EJEMPLO ARRASTRA

    En el futbol se predica con el ejemplo, no sé anda presumiendo de lo que careces. Debes de saber que la vestimenta no hace al futbolista, en la mayoría de los casos el que mejor pinta tiene es el que más malo es, es ley de barrio. El que más alardea, el que más presume termina muriendo por su propia boca, basta verlo 5 minutos en el campo para desenmascarar tal actuación. Los grandes futbolistas, los diferentes, se mantienen en silencio, perdidos en su humildad; ellos aman este deporte y tienen bien en claro que aquí se habla en la cancha, con acciones. El talento siempre se impone, no necesita presentación. La calidad no se encuentra en unos botines nuevos, ni en el uniforme más bonito, ni en tu nueva muñequera o en el mejor peinado; el talento no se vende, se construye, se trabaja. Invierte tiempo en practicar y deja de subir fotos a redes Pasa más tiempo frente al balón y no hablando de el a sus espaldas Duerme temprano, alimentate bien y deja las malas costumbres, los vicios. Si quieres mejorar tienes que esforzarte, si no serás uno más, uno más del montón que habla más de lo juega. Respeta el balón, respeta a los que amamos este deporte.

  • LOS PADRES Y EL FÚTBOL...

    LOS PADRES Y EL FÚTBOL BASE: COMO AYUDAR A TU HIJO A SER FELIZ Miles de niños desde cinco años (Babys) hasta los 18 (juveniles) empiezan sus ligas de fútbol, deporte que a día de hoy sigue siendo el mayoritario en Colombia. Junto a ellos acuden a los entrenamientos y a los partidos padres, madres tíos o abuelos a compartir con ellos la emoción por un deporte que generalmente comparten. Desgraciadamente, el fútbol base es en la actualidad cada vez más conocido por peleas, broncas y agresiones a árbitros que por sus valores como deporte y herramienta para socializar a los jóvenes. Este es un pequeño decálogo para aquellos padres que buscan la felicidad de sus hijos y que sólo desean que hagan deporte, se socialicen y, sobre todo, sean felices. 1. EL FÚTBOL ES UN JUEGO; DEJA DISFRUTAR A TU HIJO Si tú no has tenido facultades para llegar a ser Messi, tu hijo no está obligado a serlo. Acompáñale a los entrenamientos y a los partidos para que juegue con sus amigos. La pregunta cuando termine de hacer su deporte favorito no debería ser: "¿Cómo ha quedado el partido. Has ganado?" Mejor sería preguntarle "¿Te has divertido? ¿Has aprendido algo nuevo? No es necesario que le presiones, cada niño aprende a su ritmo. Agobiarle nunca será una buena idea porque convertirás un juego en un ejercicio estresante para él 2. NUNCA PIERDAS LAS FORMAS; NI EN LA VICTORIA NI EN LA DERROTA Un niño de cinco añitos, se hizo famoso cuando en mitad de un partido tuvo que poner paz entre su padre y un árbitro, que estuvieron muy cerca de pegarse. “Paren, paren, paren...”, les dijo el niño para evitar una pelea segura. Y es que el resultado en el fútbol base es lo menos importante. No merece la pena celebrar una victoria del equipo de tu hijo como si fuera la Champions ni hacer un drama de una derrota. Ellos seguramente se habrán olvidado del resultado a los diez minutos de terminado el partido. 3. VALORA EL ENTORNO, NO LA CATEGORÍA DEL CLUB Lo más importante es, como decíamos antes, que tu hijo sea feliz en un entorno que le haga crecer como deportista y como persona. Si el club que has elegido para que haga deporte cumple con esas premisas, ¿qué más dará si tu hijo juega en Primera, en Segunda o puede aspirar a ganar algún título? 4. RESPETA LAS DECISIONES DEL ENTRENADOR El niño necesita unas referencias; y el entrenador es de una de ellas. Es probable que la persona que enseña fútbol a tu hijo ni siquiera cobre por ello y lo hago de manera altruista. Él es el que decide cuantos minutos juega tu hijo y la posición que debe desempeñar en el campo. Cuando acudas a ver un entrenamiento o un partido, tu hijo sólo debe escucharte cuando le animes a él y a sus compañeros. Las indicaciones técnicas sólo las debe dar el entrenador. Si el niño escucha a su padre y a su entrenador durante un partido y los consejos son contradictorios: ¿A quién debe atender? Será un lío tremendo para él. 5. RESPETA AL ÁRBITRO Parece lo más lógico, pero es lo menos habitual. Es raro el partido de fútbol base en el que desde la grada no sale un insulto contra el árbitro. Sin árbitro no habría fútbol de competición y ellos también están aprendiendo en el fútbol base, lo mismo que nuestros hijos. El ejemplo del niño con su padre y su entrenador habla por sí solo. 6. RESPETA A LOS COMPAÑEROS DE TU HIJO Los compañeros de equipo de tu hijo son sus amigos, no sus rivales. No compite con ellos por un puesto en el equipo, ellos juegan juntos para divertirse y conseguir un bien común. Si cuando vas a verle jugar haces comparaciones entre ellos o gritas diciendo que tu hijo es mejor que un compañero te estarás equivocándote gravemente. Y estarás generándole un problema a tu hijo. 7. CULTURA DEL ESFUERZO, NO DEL RESULTADO Si tu hijo está aprendiendo, se esfuerza en cada entrenamiento o en cada partido, el resultado no tiene ninguna importancia. 8. COMPROMISO CON TU HIJO Y CON EL EQUIPO Cuando apuntas a tu hijo a un equipo de fútbol lo haces con todas las consecuencias. Desde que empiece la liga no habrá viajes de fin semana, puentes, ni escapadas a una casa rural porque tu hijo necesita a sus compañeros para jugar, y ellos le necesitan a él. Por no hablar de partidos a las 9:00 am de un sábado en los que hay que estar una hora antes en el campo. El compromiso es para toda la temporada y tu futuro crack no puede ir sólo a los partidos. 9. CASTIGADO SIN IR A ENTRENAR Cuando avanza el curso y los niños pierden alguno asignatura, es habitual que los plantillas de los equipos se queden con pocos jugadores porque hay muchos niños castigados. Y si no es por este motivo, es por mal comportamiento en casa. Pero lo que los padres no entienden es que castigando a su hijo sin ir a entrenar o a jugar están castigando también a sus compañeros porque el fútbol es un deporte de equipo. Hay otros castigos; no ver la tele, no usar la consola ni el móvil.... Y seguro que mucho más efectivos. 10. EL TERCER TIEMPO   Aunque este es un concepto más de rugby que de fútbol, tu hijo agradecerá compartir el post-partido junto a sus compañeros. Hacer vaca junto a sus compañeros ayudará a su socialización y a ti, padre de una futura estrella, te vendrá bien tomarte una cervecita de manera relajada junto al resto de los padres. DEJEN JUGAR A LOS NIÑOS, QUE DISFRUTEN ES SOLO UN JUEGO. William Rodríguez      

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